El panel de expertos duda de la fiabilidad de algunos certificados energéticos españoles", así concluye el barómetro IPD basado en encuestas a consultoras e inmobiliarias. Que no todos los que se ofrecen se ajustan a lo regulado, se ha plasmado en algunas denuncias a los servicios de inspección.
Entretanto, algunas comunidades autónomas han aprobado tasas a sumar a lo que le cobre el técnico por la certificación. Ese es el caso de la Comunidad Valenciana, donde el proyecto de ley de medidas fiscales, de gestión administrativa y financiera y de organización de la Generalitat, fija tasas a pagar a la hora de registrarlos. Según recoge www.presupuestoCe.es: para unifamiliares será de 10 euros; de 20 para bloques de pisos, más 3 euros por vivienda con 400 euros como máximo. En el caso de locales, edificios o partes de edificio del sector terciario, 50 euros más 0,10 por metro cuadrado con un tope de 1.500 euros.
Estas tasas para los gastos de registro e inspección encarecerán previsiblemente el certificado por el que se pagan precios que producen más que preocupación en los técnicos, según puede verse en www.inarquia.es.
El 19 de noviembre, seis meses después de aprobar el certificado, el Gobierno aprobó tarifas de referencia para los certificados, tasaciones y auditorías a realizar por la Sociedad Estatal de Gestión Inmobiliaria de Patrimonio (Segipsa) por encargo de la Administración. Fuensanta Carmona, responsable de las citadas páginas web, se hace eco de una petición de los técnicos, la de si no sería deseable algún tipo de regulación también para los precios cuando se trata de inmuebles privados —con permiso de Defensa de la Competencia— tal que impidiese la proliferación de precios "basura" y, en consecuencia, certificados basura.
En algunas webs puede verse que se expiden sin la visita obligada del técnico y que es el inquilino o el propietario el que rellena un formulario que firma aquel.
El precio fijado por Segipsa para inmuebles de hasta 80 metros cuadrados es de 184,34 euros. Por encima de los 150 anunciados por las sociedades de tasación como Tinsa o los 140 de ST. En el caso de las inmobiliarias que han firmado en la zona de Levante un convenio con arquitectos técnicos, manejan 1,5 euros por metro cuadrado. Cuando se hace junto con una tasación, en caso de compraventa con hipoteca, al requerir trabajos comunes, baja el precio, explica Mar Sanz Llorente, del Grupo Pavisa. Como ejemplo, por un piso de hasta 200.000 euros se cobran 260 euros por tasación y 110 por certificación energética. Si se encargan ambas, esta última se reduce a 55 euros.
También la Empresa Municipal de la Vivienda y Suelo de Madrid ofrece certificación para los propietarios de los más de 20.000 pisos de su Servicio Municipal del Alquiler y el precio es de 100 euros con IVA aunque, inicialmente, se fijó en 181 euros, ajustándose a lo que hace meses era el mercado. Esto reafirmaría lo que comentan en www.inarquia.es "el precio tiende a cero", ya que hay redes organizando subastas de precios en tiempo real en las que los técnicos pujan por realizar el trabajo, obviamente, a la baja.